23 de abril de 2024
La incontinencia urinaria es la pérdida involuntaria de control de la vejiga, lo que provoca la emisión de orina de forma imprevista. Puede presentarse en diferentes grados de gravedad y tener diversas causas, como la debilidad de los músculos del suelo pélvico, problemas en el sistema nervioso, infecciones del tracto urinario, entre otros. En este artículo te explicamos las principales causas y soluciones para la incontinencia urinaria.
El suelo pélvico es una parte fundamental del cuerpo humano, pero sus disfunciones son a menudo un tema tabú que afecta la calidad de vida y la salud emocional. Está formado por músculos y ligamentos en la base de la pelvis, en relación estrecha con los músculos abdominales, el diafragma y la columna lumbar. Más de 3 millones de personas tienen incontinencia urinaria en España, en su mayoría mujeres, donde la prevalencia es de 1 de cada 4 en edad adulta frente a 1 de cada 9 varones. En las mujeres suele aparecer en dos momentos fundamentales de su vida, después del parto y con la menopausia.
Existen varios tipos de incontinencia urinaria en base a sus síntomas:
Si padeces alguno de estos síntomas, lo más recomendable es que acudas a un especialista para poder hacerte un diagnóstico. En la Clínica de Cirugía y Medicina Estética de la doctora Carmen Iglesias podemos asesorarte sobre qué tratamientos son los más adecuados para solucionar tu incontinencia urinaria.
Las incontinencias más leves se pueden tratar habitualmente con un fortalecimiento del suelo pélvico, haciendo tablas de hipopresivos y de tratamiento de fortalecimiento de la musculatura tanto abdominal como lumbar. Estos ejercicios son efectivos, pero sólo cuando se realizan a diario, es decir, es importante que un profesional especializado nos explique cómo realizar unos hipopresivos, pero si no le dedicamos 20 o 30 minutos cada día a realizarnos servirán de poco. También resulta bastante útil la utilización de bolas de Kegel, con las que se consigue reforzar la musculatura del suelo pélvico. En combinación con estos ejercicios, se pueden utilizar terapias de electroestimulación que nos permiten tensar la zona abdominal.
Para los casos moderados de incontinencia urinaria, en los que los ejercicios no consiguen reducir las pérdidas de orina, se puede tratar con láser. IncontiLase es un tratamiento con láser Er:YAG que consiste en estimular la producción de colágeno en el tejido vaginal y en la fascia endopélvica, lo que ayuda a fortalecer y estrechar estos tejidos y proporcionar un mejor soporte a la vejiga. Este proceso se basa en la estimulación fototérmica no ablativa, lo que significa que no se daña la capa superior de la piel durante el tratamiento. Gracias a esta estimulación, se logra mejorar los síntomas de la incontinencia urinaria de forma no invasiva. Para que el tratamiento resulte efectivo, se recomienda realizar de dos a cuatro sesiones.
Las ondas de choque son otro tratamiento no invasivo que también favorece la formación de un suelo pélvico con buena contención y esas se pueden utilizar tanto en hombres como mujeres. Funcionan emitiendo ondas de alta energía que se transmiten a través de la piel hasta llegar a los músculos del suelo pélvico, estimulando la regeneración de los tejidos, aumentando el flujo sanguíneo y promoviendo la contracción muscular.
La incontinencia urinaria puede condicionar la vida de las personas que la padecen, llegando a limitar su vida social. Realizando ejercicios de suelo pélvico, mantenido unos hábitos de vida saludables y con la ayuda de tratamientos de neuro estimulación con láser u ondas de choque, se consigue una remisión casi absoluta de los síntomas en un porcentaje muy elevado de pacientes.