17 de julio de 2024
La doctora Carmen Iglesias ha sido entrevistada en el programa Capital Sénior, de Capital Radio, un espacio conducido por Francisco Miguel Pérez Torres en el que se conoce a profesionales veteranos y nos descubren el secreto de su éxito.
La doctora compartió estudio con Arantxa Lozano, directora del área de personas, talento y cultura corporativa de GMP.
En esta entrevista pudimos conocer mejor a la doctora Iglesias, que contó en el micrófono que le llevó a dedicarse a la cirugía plástica “es un campo muy amplio, se puede desarrollar en cualquier parte del cuerpo y es muy dinámica y multidisciplinar, ya que colaboramos con distintos especialistas quirúrgicos.”
En el programa pudimos conocer algunos de los tratamientos que se realizan en la clínica, tanto de cirugía reconstructiva como de estética, quizá el área más conocida de esta especialidad. Uno de los tratamientos que se realizan en la clínica, y que tal vez no sea del todo conocido por el público general es el linfedema , una secuela, en la gran mayoría de los casos, de los tratamientos oncológicos, que consiste en la acumulación de líquido linfático bajo la piel, lo que produce una hinchazón que causa dolor y pesadez en cara, brazos o piernas, mermando la calidad de vida de quienes lo presentan.
La doctora también habló del lipedema , una patología que desarrollan el 11% de las mujeres y que consisten en la acumulación de grasa en piernas, tobillos y cadera que puede limitar la capacidad de movimiento, de realizar ejercicio físico y generar complejos en las pacientes, ya que es una grasa que no desaparece con la pérdida de peso.
En cuanto a los tratamientos que más se realizan los hombres, la doctora Iglesias explicó que los jóvenes se decantan más por la eliminación de las “orejas de soplillo”; y por la rinoplastia , mientras que los adultos optan más por el lifting en varias zonas del cuerpo. En cuanto a las mujeres, las más jóvenes piden, sobre todo, aumento de pecho, mientras que las adultas se realizan más rejuvenecimiento facial, así como tratamientos para disimular las posibles secuelas de los embarazos, eliminar depósitos de grasa, … “Los hombres suelen tener claro lo que quieren, las mujeres, en cambio, a veces llegan preguntando qué les haríamos.”
Uno de los aspectos que destacó la doctora en su entrevista es la seguridad de la cirugía plástica, donde el riesgo es menor de un 1%, y dónde es fundamental la técnica quirúrgica. Gracias a los avances en tecnología, se utiliza cada vez más el láser y la radiofrecuencia, y hoy en día, con la ayuda de un robot, las operaciones son más cómodas, eficientes y presentan menos complicaciones. Lo más importante a la hora de realizarse una operación de cualquier tipo es realízasela en un centro seguro y certificado, y con un cirujano especialista, ya que no todos los cirujanos pueden operar todo.
Desde que abrió su propia clínica, además de seguir trabajando en la Clínica Nuestra Señora del Rosario y en el Hospital Universitario La Paz de Madrid, la doctora ha desarrollado otras habilidades, las conocidas como soft skills, necesarias para dirigir un equipo y también de cara al objetivo de su clínica, que nació con la idea de dar cuidados post operatorios más agradables a los pacientes y qua, ahora que realiza una amplia gana de tratamientos con un equipo médico, está centrada en la experiencia del paciente. Para esto es necesario mezclar empatía y asertividad, y saber decir a un paciente que sus expectativas no son realistas, explicarle hasta dónde se puede llegar, o saber dar, también, malas noticias.
En cuanto al nivel de madurez de las personas que se quieren someter a una operación estética, la doctora explicó que sí operan a menores a partir de 16 años que pueden tener deformidades severas en las mamas, “pueden condicionar su vida personal, su desarrollo cognitivo y su desarrollo profesional, porque se pueden sentir muy acomplejadas”. También se operan las orejas de soplillo a niños antes de los 5 años, ya que su incorporación a la escuela puede marcarles su personalidad.
Las últimas corrientes en estética abogan por una cirugía menos invasiva y con recuperaciones más rápidas para poder volver al trabajo y a las rutinas lo antes posible. “En cirugía reparadora llevamos más allá las indicaciones quirúrgicas, cosas que antes se amputaban ahora no lo hacemos; tumores que antes no se podían resecar porque no se podían reconstruir ahora sí es algo que se hace”, explica.
“La cirugía plástica es una especialidad maravillosa; no nos podemos olvidar de la parte reparadora de nuestra especialidad, que tanto ayuda en la reconstrucción oncológica. En cuanto a la parte estética, consultemos y seamos siempre conscientes de dónde queremos llegar.”